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17 de marzo de 2010

ALGO MÁS QUE UN OPORTUNISTA

Milano negro (Milvus migrans)
La mayoría, tenemos la imagen del Milano negro como la de una rapaz poco cazadora y mas bien oportunista que se alimenta de carroñas, basuras o de insectos. Sin embargo estamos ante un ave muy capaz de atrapar sus propias presas, ya sean pequeñas aves o mamíferos.
En una ocasión me quedé pasmado al ver un Milano negro que teóricamente se alimentaba de insectos junto a un gran bando de vencejos y que en un descuido apareció con uno de ellos (Vencejo) entre las garras.
Otra vez, un Milano persiguió a un Cernícalo que acababa de cazar un lagarto, hasta hacerle soltar la presa ante mi cara de admiración. Eso sí, a continuación se llevó un par de pasadas del Cernícalo "herido en su orgullo" pero el lagarto ya no cambió de propietario.
En esta ocasión, nuestro protagonista prospectaba su territorio y después de dedicarme unas miradas y engarrarse con la que probablemente sea su pareja, descendió súbitamente a un montón de hierba seca.
Seguí la acción con la cámara y enseguida me di cuenta de que se trataba de un lance de caza.
En el momento, no me di cuenta de qué se trataba, pero cuando se elevo y se alejaba, la silueta que se dibujaba contra el cielo no dejaba lugar a las dudas:
Una pedazo de Rata bien agarrada por la cabeza y que apenas opuso resistencia.
Una nueva lección que me ofrecía la naturaleza y que me deja bien a las claras que las apariencias engañan y hace que mi admiración por los Milanos suba más si cabe. Oportunista sí, pero un cazador con todas las letras.
Ratonero común (Buteo buteo)
Otro con pinta de tranquilo pero con iguales condiciones para buscarse la vida, este Ratonero utiliza su método más clásico para capturar sus presas, desde un poste o un cable y con mucha paciencia a la espera de un movimiento delator de su presa.
Ratonero común o Busardo ratonero (Buteo buteo)
En este caso, fue a mí al que le faltó la paciencia para quedarme hasta el final de la escena pero prometo que otro día le dedicaré el tiempo suficiente para fotografiar el desenlace de la jornada de caza del Ratonero.

5 comentarios:

Javier Gil Vaquero dijo...

A mi me encantan los ratoneros. A veces, por aquello de que abundan mucho, no les hacemos mucho caso...., pero es una gozada echar tiempo espiándolos...y no te quiero contar si encuentras un nido que se pueda controlar desde lejos.

Nacho Vega dijo...

Hola:

También el Busardo ratonero es buen cazador. Que se lo pregunten al zarapito trinador que, hace ya muchos años, casi acaba de desayuno de un ratonero común (de aquella, así se llamaban) en la playa de El Arbeyal, Gijón, Asturias.

Preciosas fotos, por cierto.

Nacho.

Javier Cañadas dijo...

Mucho merito lo del Milano pues con las ratas no se atreven ni los gatos mas curtidos.

Ángel Ruiz Elizalde dijo...

La rata estaba muerta joer, jeje. Saludos Ernesto y enhorabuena por la observación.

Ernesto Villodas dijo...

A veces no disfrutamos de nuestras especies más comunes,que tenemos tan a mano que no le hacemos aprecio cuando nos pueden deparar jornadas magníficas. Gracias por compartir experiencias y opiniones. La rata estaba viva aunque en las fotos se la ve un poco parada, jeje. Saludos a los cuatro.